domingo, 13 de abril de 2014

Bollitos transgresores Fina y ¡Viva mi abuela!









- Señora , ¡¡la niña se comió todos los bollitos de la merienda!!-
  - Haga más, Áurea ...haga más... -
                         
Indudablemente esta frase de mi abuela marcó mi vida emoculinaria  y la sigue marcando. Me gusta ¨hacer más¨ primero porque tengo tendencia a la abundancia en la mesa (como mi abuela) y después porque si te piden que ¨ hagas más ¨ será porque  has cocinado cosas ricas riquísimas   ¿non si?






Te diré que este post donde vitoreo descaradamente a mi abuela tiene uno de los puestos mas altos en la escala  Emoculinaria de esta menda .Por muchos motivos . Te contaré unos cuantos . 
La abuela Fina era una de las personas mas extraordinarias que he conocido. Una mujer adelantada a su época en muchos sentidos a la vez que muy apegada a ciertas tradiciones.  Tenía un vocabulario propio, refraneaba constantemente  y su forma de tomarse las cosas (incluso  las malas) y la vida en general  era  tremendamente inteligente y positiva. 

Era una enamorada de la vida , una disfrutona y una sensorial en toda regla .Le encantaba comer y era una golosa que rozaba lo adictivo y lo pecadento . En su casa se desayunaba, se tomaba el aperitivo, se comía, se merendaba y se cenaba todos los días del año y cada momento culinario estaba lleno de costumbres,rituales y vidilla.


Era alegre,generosa y consentidora.Se reía de su sombra y me enseño muchísimas cosas. Conviví tanto con ella hasta que se fue que podría decirte que para mi era la persona más importante de vida aparte de mis padres . Los paseos con ella por la calle del Principe de Vigo eran todo un gustazo y evidentemente siempre nos tomabamos juntas algún que otro pastel, un tocinillo, un par de agujas de ternera,unas cañitas... ¡Ahins! Como para mucha gente su  abuela es o era  la mejor del mundo pero la verdad es que Fina era maravillosa en todos los sentidos.
¡Tengo tanto que agradecerle! La adoraba y la sigo adorando. 


Las meriendas diarias (excepto los domingos) de mi abuela  con sus amigas después de las partidas de cartas apostando céntimos eran todo un número ¡Como se ponían para reponer fuerzas entre mano y mano de naipe !


Yo siempre que podía (desde bien pequeña y hasta que se fue Fina) me unía a la mesa al regresar del colegio y tomaba de todo (té incluido con leche y azucarillos)
Era  un comedor amplio y soleado, con una mesa de merienda delicadamente puesta llena de pequeños detalles y con muchas peperetadas  irresistibles.


Eran unas merendolas deliciosas y estimulantes en todos los sentidos y para los cinco sentidos . ¡Que grabadas me quedaron en la mente y en el corazón !


Quien me conoce bien sabe que le doy una enorme importancia a la merendola. Ahora entenderás de donde me viene la afición.
Me encanta  ese momento de la tarde cuando ,terminadas las tareas más urgentes (se va aprendiendo poco a poco esto de diferenciar  lo urgente de lo importante )te sientas con la clara intención de hacer una pausa. 
Momento para darte un homenaje y situarte ante la comida ya no por hambre sino por el deseo de degustar consciente y tranquilamente una serie de alimentos o preparaciones en pequeños bocados dulces y salados mientras te dejas llevar simplemente por el momento y ¡disfrutar atodoloqueda!














Te confieso que en aquellas meriendas también aprendí(además de jugar al poker ,la canasta,el pinacle y la siete y media) a pintarme los labios , a caminar con tacones y a utilizar abanico y mantón de manila . Me dejaba entrar en su dormitorio,armario y tocador todo lo que me daba la gana .Es más lo fomentaba. Mi primera minifalda mi primer bikini y mi primer traje de noche super escotado  me lo compro ella y siempre decía que le hubiera encantado nacer unos años mas tarde para poder hacerlo ella también . Podría estar hablando de mi abuela Fina horas y horas ,pero vamos sin mas al tema de los bollitos transgresores y del  ¨Haga más¨. 




Me encantaban sus meriendas y me encantaba colarme en su cocina y trajinar entre fogones con la cocinera de turno (fueron unas cuantas). También me encantaba ¨ROBAR¨ (en el sentido más literal del término ) cosiñas ricas que se cocinaban  durante todo el día ¡como estaba de activa aquella cocina! Era un gustazo.

Siempre me cazaba la cocinera ,y sobre todo siempre me cazaba una cocinera  que  estuvo en su casa muchos años y se llamaba Áurea . Me reñía muchísimo, corría indignada  a decírselo a mi abuela  y ¿sabes  lo que contestaba ella?

                                  ¡Haga mas Áurea ,haga más!

Mi abuela tenía siempre unos cuantos botes de bicarbonato apilados en el cuarto de baño y en la cocina. Era frecuente oírla decir que había que pasar por la farmacia para tener repuesto de sobra. 
A mi me tenían completamente abducida los bollitos y mi abuela ¡más!


Esos bollitos me arrastraban irremediablente al delito.Recuerdo la emoción que me producía encerrarme en la despensa de su cocina, abrir la lata donde se guardaban los bollitos para su mejor conservación, y comerme todos los que podía.
Si cierro los ojos puedo ver la imagen claramente ,escondida y silenciosa con la boca a rebosar de bollitos . Recuerdo su delicioso sabor a mantequilla,el aroma al destapar la lata, recuerdo el sonido de los bollitos aupados por el bicarbonato al meterlos en la boca ,la textura muy del tipo de los  scones .
Los distintos tamaños (no todos eran iguales) y de los que tenían mas pasas  .Lo de llevar mas o menos pasas  era una cuestión de azar ,podía tocarte un bollo con varias pasas o con una pasa. Creo la expectativa del tema pasas , totalmente aleatorio ,aumentaba el placer a la hora de degustarlos. Pero lo mejor de todo sin duda era la sensación de estar transgrediendo una norma .
Siempre que los hago me siento muy traviesa, te lo digo y te diré más ,cuando llevo unos días de esos de disciplina, horarios rígidos , normas y obligaciones y tal , en cuanto tengo la posibilidad preparo una buena cantidad y cuando puedo me escapo unos minutos, abro la lata (suelo tener una lata preparada para ello) me escondo en un lugar en penumbra o apago la luz y me como unos cuantos .Por alguna extraña razón estos bollitos me gustan mas si los como así, a solas y si puede ser escondida y sin que nadie me vea ¡mucho mejor!
No se lo cuentes a nadie, es un secreto. De todas formas por si te gusta el plan  (nunca se sabe)aquí te dejo la receta :


Normalmente suelo doblar la cantidad de ingredientes ya que como te digo son unos bollitos adictivos que además se conservan estupendamente en una lata ,si es que  sobran,claro ...



Bollitos Fina


 Ingredientes 

  *200gr de harina de trigo

 *70 gr de mantequilla en pomada
 *1 huevo grande
 *La ralladura de medio limón
 *Un pellizco de sal
 *2 cucharadas de postre azúcar
 *Una cucharadita de Bicarbonato y
   una cucharadita de Royal.
 *50 gr de pasas .

Preparación:
Mezclas todos los ingredientes dejando la harina mezclada con las pasas para el final.Trabajas la masa hasta que se integre bien y consigas una bola suave y brillante . Dejas reposar la bola unos 15 minutos tras los cuales comienzas a hacer bolitas redondas del tamaño de una nuez hasta agotar existencias.
Las colocas en bandeja de horno forrada con el papel de hornear convenientemente dispuesto .
Horneas a 180º (arriba y abajo) hasta que los veas con ese tono dorado que tanto nos gusta.





















Por cierto , ayer estos bollitos tuvieron un protagonismo especial en el Taller-experiencia de Emococina y Educación del Gusto donde  la de la bata blanca y la del mandilín trabajaron juntas que no revueltas  ¡Ay si me viera mi abuela! 
Las dos ,junto a otras mentes degustadoras ,compartimos una velada fantástica. 











Victor Gomez Romero ,Luis Domenech, Jose Luis Oliveira Pereira, Teresa/MissSlower, CarmenAlbo, María José Laurel y Canela  y Sandra Novo Sanchez .



¡Gracias a todos! Ya formáis parte de la memoria emotiva de Miss Slower y de Teresa. 
                                        
                                         ¡ Hasta siempre!






       
















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