jueves, 21 de febrero de 2013

Lucera y yo : Chuletillas de cordero en hojaldre


Tengo yo una ovejita Lucera ...Poco después me comí (sin saberlo) su sesada con patatita cocida pisada y merengue de fresa. 
Si, has leído bien ,estas asquerosidades las comía yo cuando aun no había descubierto el placer de comer y mi papila degustadora estaba sin educar 



Hace años ,cuando esta menda usaba capota y vestiditos de lunares había una tremenda afición por parte de los padres  a dar sesada a los más pequeñ@s de la casa como super alimento y ,claro ,la cuestión en este caso estaba cantada. Yo comía fatal en aquella época y mis progenitores utilizaban todo tipo de recursos para sobrealimentarme aun cuando fuera permitiéndome hacer mezclas inverosímiles para poder tragar lo salado en general 
Mas adelante (con 7 años ) cuando  ya empezaba a comer mejor y me enteré de lo que me pareció una crueldad espantosa ,lloré y pataleé durante días. Meu pai Javier  me consolaba y me contaba cuentos sobre corderos encantados y otras historias reconfortantes y finalmente consiguió que me gustara la sesada ¡ Increíble !  De hecho le llamo ¨Lucera¨ a la sesada . A la de cordero, la de ternera, la de cochinillo...
Te diré también que Lucera al espeto por lo que me contó meu pai, estaba maravillosa . Lo cuento ahora desde la visión de una adulta y teniendo en cuenta que el cordero  (culinariamente hablando ) me encanta .
Y como de  cordero va la cosa y para compensar lo de la sesada ,hoy voy a compartir contigo una delicia corderil que me encanta .
Las chuletillas de cordero hojaldradas al estilo de Javier .Me las preparaba a menudo en parte como desagravio por lo de la sesada de Lucera  y también porque desde que empecé a comer decentemente este plato resultó "amor a primera chuletilla "
Tengo completamente grabada en mi mente la escena de una niña sentada en el suelo del salón con un plato de chuletillas de cordero en hojaldre recién sacadas del horno.
Niña sonriente llena de apetito y emitiendo sonidos tipo ¡Mmmmmmmmmmmmmmm! ¡ Ñam,Ñam !

Siempre que  reproduzco la escena (puede que cambie la postura)  pero la sonrisa, el apetito y los sonidos son exactamente los mismos, te lo digo. Me vuelvo muy , muy pequeña, la verdad.


    Ingredientes y preparación


Para ocho chuletillas de cordero de las de palo 

*60 gr de mantequilla 
*Tres chalotas
*Una plancha de hojaldre (mejor rectangular)
*Sal, pimienta blanca molida y perejil picadito
*Un huevo batido para pincelar el hojaldre antes de hornear .

                                                        
Pochar en la mantequilla las chalotas picadas en brunoise. Cuando estén transparentes pasarlas a un mortero y chafarlas no demasiado con la sal ,la pimienta y el perejil haciendo una farsa . Con esta farsa untar bien las chuletillas de cordero por ambos lados. 
Ahora llega el turno de envolverlas en hojaldre. Estirar bien una plancha rectangular de hojaldre y cortar ocho cuadrados (uno por cada chuletilla). 
Envolver cada chuletilla en hojaldre cono haciendo un paquetito y dejando parte del hueso a la vista. Sellar bien el hojaldre y pincelar con huevo batido por ambos lados.
Colocar en una fuente de horno forrada con papel vegetal y hornear unos 15 minutos a 180º (horno precalentado )  .El hojaldre tiene que adquirir ese tono dorado que tanto nos gusta .

Degustar recién sacadas del horno con el hojaldre crujiente y esa interior repleto de ternura corderil  achalotada es un auténtico escándalo . Acompañadas de una buena ensalada  y punto . Es de esas recetas que refuerzan el concepto de " A veces Menos es Más "  
¡Son una auténtica delicia ! 






























Papá ¡cuanto te echo de menos !




No hay comentarios:

Publicar un comentario